Uncommon Finance ¿Qué está pasando?

Como ha ido cambiando el mundo de la inversión en la última década

Los tiempos avanzan que es una barbaridad y nos traen cambios de todo tipo. Hábitos que se pensaban instalados en nuestra mente desde el homo sapiens se sustituyen por otros en años sin ningún pudor. La capacidad de adaptación siempre ha sido importante en el ser humano pero en estos tiempos de velocidad vertiginosa parece más importante si cabe.

Dentro de estos cambios se hayan los hábitos financieros de los ciudadanos. Primero hubo años en los que muy pocos tenían acceso a los mercados financieros, cuatro ricos. Después poco a poco se fue extendiendo este acceso generalizándose en las pasadas décadas. En actualidad vivimos otro cambio profundo, lo que antes se ceñía a compras individuales de acciones o bonos, ahora se realiza de forma mutualizada a través de planes de pensiones, fondos indexados, ETFs; tampoco hay que olvidar a los fondos de inversión soberanos que suponen un alto porcentaje en este tipo de inversión.

Como podemos apreciar en el gráfico la inversión en gestión pasiva tanto de bonos y de acciones ha ido aumentando durante la última década. La compra activa de bonos se ha mantenido estable mientras que la compra activa de acciones ha caído de forma considerable. La gestión pasiva de acciones aumentó 3 billones de dólares, en esa misma proporción disminuyó la gestión activa de este activo.

Fuente: @jessefelder (vía Financial Times).

¿Es el sector energético una gran oportunidad?

Uno de los sectores más castigados de esta crisis es el energético. Llevan una década que no levantan cabeza (cayendo). Sentiment trader publicaba en septiembre que las acciones de energía eran las mas odiadas de todo el parqué.

A esto se suma que The Economist sacó su portada el pasado 17 de septiembre bajo el titular “Is the end of the oil age?” (¿Es el final de la era del petróleo?).

En este tipo de situaciones extremas, suele funcionar muy bien la ley de sentimiento contratio. Si vienen confirmadas por instituciones oficiales o medios mainstream, la probabilidad suele ser mucho mayor.

No es la primera vez que The Economist sale con esta portada. Como se ve en la imagen también lo hizo en 1999 y 2003. Mira lo que sucedió después.

El anuncio de Pfizer esta semana sobre la efectividad de su vacuna ha hecho que las empresas energéticas, junto con aerolíneas, restauración, compañías de cruceros y hoteles, se disparen hasta un 30% en un solo dia.

Como apuntamos en la entrada “Petróleo y coches”, la principal partida de importación de casi todas las economías es pétroleo y coches. Si la economía se está recuperando, parecería lógica que las empresas energéticas fueran una oportunidad.

Aunque como ya sabemos, la lógica no ha sido la herramienta más útil para interpretar los mercados financieros en su relación con la actividad económica estos últimos años.

Fuente imagen: The Felder Report

El S&P 500 y Bitcoin van de la mano

Bitcoin es un activo con apenas 10 años de historia, por lo que la información que disponemos del mismo es muy limitada. Una de las teorías es que se podría convertir en un activo refugio, similar al oro, debido entre otras cosas a que teóricamente su producción (minado) es limitada y llegará un punto en el que no se podrán crear mas criptomonedas de este tipo.

La realidad es bien diferente, por lo menos durante este 2020 en el que estamos observando una correlación muy alta con la renta variable americana. Su comportamiento es prácticamente idéntico, si tenemos en cuenta que la semana pasada bitcoin rompió el techo de los 15.000 dólares y el S&P 500 continúa su escalada en este mes de noviembre, no sería descabellado pensar que la criptomoneda alcanzase su máximo histórico de 20.000 dólares.

Lo que está claro es que cada vez más institucionales están invirtiendo o aceptando (como es el caso de Goldam Sachs) esta nueva divisa, lo que le está dando mayor autoridad. Se está haciendo un hueco en los mercados financieros.

Fuente: Topdown Charts

Divergencia entre los mercados bursátiles y el Smart Money Index

El ‘Smart Money Index’ es un indicador de sentimieno de análisis técnico que mide las operaciones realizadas por los inversores profesionales con respecto a las realizadas por los inversores amateurs. Se calcula tomando las operaciones realizadas en la apertura de mercado y comparándolas con las que se realizan cerca del cierre. Se presupone que los inversores menos informados operan en la primera media hora tras la apertura del mercado mientras que los inversores profesionales lo hacen la última hora de la sesión. Este indicador hay que tomarlo a modo orientativo como detector de tendencias en los sentimientos del inversor mas que como una ciencia exacta.

Cómo podemos observar en el primer gráfico existe una divergencia de libro entre el comportamiento del SP 500 (SPX) y el “Smart Money Index” pareciendo señalar que detrás de este último arreón del SP 500 están las manos más inexpertas inversoras.

Como podemos observar la misma divergencia se puede apreciar también en el Dow Jones, marcando el mismo sentimiento de mercado que el precedente gráfico del SP 500.

Fuente: Zerohedge.com

Petróleo y coches

Hay cosas que cambian, y hay otras que no. La importancia del petróleo y los coches pertenecen a esta segunda categoría.

En la imagen aparecen la partida más importante de importación de cada país. En todos los países, salvo el continente africano, se repiten las mismas dos partidas: petróleo y coches.

En el caso de España es el petróleo, la dependencia energética del exterior es un tema estratégico que sigue siendo un punto débil. Llama la atención Venezuela que, a pesar de tener una de las mayores reservas de petróleo del mundo, su principal importación sea precisamente esta.

Otra cosa que llama la atención es su poco peso en las bolsas. Por ejemplo suponen solo un 2% del S&P 500. Existe un abismo entre los mercados financieros y la realidad económica.

La venta de coches se considera un indicador adelantado de la actividad económica, el precio del petróleo tiene un peso enorme en la inflación (viene muy marcada por este).

Fuente imagen: Howmuch

Cómo se comportó el mercado con respecto al porcentaje de muertes en la gripe española

La historia muestra ser cíclica en muchos de sus aspectos aunque es verdad que nunca dos eventos históricos suelen ser idénticos. Suele acontecer que hay elementos comunes en eventos parecidos que nos dan pistas de por donde pueden tirar los futuros sucesos.

Si queremos comparar la actual pandemia con otra reciente, la más próxima y similar a la actual fue la mal llamada “gripe española”. En el gráfico se muestra qué sucedió con los mercados financieros ( en el DJIA, Promedio Industrial del Dow Jones) con respecto al porcentaje de muertes medidas por cada 1000 personas. Como podemos observar el máximo alcanzado en el DJIA durante la primera ola ocurrió un poco antes de que se alcanzara el máximo en el ratio de muertes (octubre de 1918). Después de este máximo el mercado cayó (-10,95% desde el máximo anterior) hasta que el porcentaje de muertes llegó a mínimos. Posteriormente en la segunda ola, aunque esta fue mucho menor que la que estamos viviendo en la actualidad, el mercado subió con tibieza no produciéndose caídas significativas. Una vez que pasó la segunda ola de la pandemia el mercado se manejó de una forma admirable subiendo de manera deslumbrante.

¿Ocurrirá lo mismo tras la segunda ola de esta pandemia?.

Fuente: the bespoke report.